Voluntarios contribuirán al estudio de las lagunas de Tierra de Campos en Palencia
• Este mes se retoman las campañas de voluntariado para participar en acciones de anillamiento científico de aves y de gestión y manejo de humedales.
• Las lagunas de La Nava, Boada y Pedraza son lugares estratégicos para la migración de especies amenazadas como el carricerín cejudo.
Fundación Global Nature lleva a cabo este verano por sexto año consecutivo un programa de voluntariado ambiental en el espacio natural de La Nava y Campos de Palencia, en la provincia de Palencia, entre los días 2 y 27 de agosto. Esta iniciativa ofrece a los participantes la oportunidad de conocer de primera mano el valor de los humedales, uno de los ecosistemas más amenazados de Europa y, en concreto, las lagunas de la comarca de Tierra de Campos de La Nava, Boada y Pedraza, desecadas hace más de 50 años y recuperadas en las últimas décadas.
Este programa, organizado y financiado por la Fundación Caja de Burgos y la Obra Social “la Caixa” a través de su programa de Voluntariado Ambiental, tiene su base en el Centro de Estudios Ambientales y Albergue de Tierra de Campos. Las actividades, a fin de cumplir con los protocolos de seguridad, se realizan en grupos reducidos en un total de cuatro turnos de cinco días cada uno.
Los voluntarios contribuyen a proteger este entorno realizando labores de mejora y limpieza. También colaboran en los trabajos de anillamiento científico de aves migratorias que se realizan en la zona para incrementar los conocimientos sobre sus estrategias migratorias (abundancia, fenología, estado físico, lugares de origen y destino de migración, etc.).
Se prestará especial atención al carricerín cejudo, una pequeña ave mundialmente amenazada que tiene en los humedales de Tierra de Campos uno de los pocos enclaves conocidos de paso migratorio desde sus zonas de reproducción en Bielorrusia, Polonia y Ucrania hasta sus áreas de invernada en Malí, Burkina Faso y Senegal, en África.
Los trabajos de investigación y seguimiento de esta especie se enmarcan dentro del proyecto LIFE Paludicola, iniciativa europea que tiene como objetivo frenar el descenso de las poblaciones de carricerín cejudo trabajando en la restauración y gestión del hábitat de los humedales que utiliza durante las migraciones.