Día de la Tierra ¿algo que celebrar?
Si hoy fuera el cumpleaños del Planeta Tierra, según Wikipedia, este planeta en el que vivimos cumpliría hoy 4.667.000.000 millones de años (año arriba, año abajo). Desde hace unos cuantos años se nos reprocha a los ecologistas un discurso catastrofista, aventurando el colapso del planeta, de la economía mundial…Compruebo cada día en columnas de opinión como, durante la actual pandemia, este discurso se ha convertido en la típica frase de madre “Ya sabía yo…Llevo diciendo esto…Estaba claro…” El catastrofismo se ha convertido ahora en afirmaciones sobre un modelo económico y social obsoleto, caduco…como si el consuelo por tener razón sirviera para algo más que para alimentar el reconocimiento que tanto necesitan algunos.
La Tierra “cumple” hoy 4.667.000.000 millones de años y nosotros llevamos sólo 38 días de confinamiento, pero creemos que esta pandemia nos ha abierto los ojos. Parece que no somos los mismos después de haber visto aguas cristalinas en Venecia, aire limpio en China, e incluso pájaros desde las ventanas! ¡Increíble! (Sólo nos falta ver el Mercadona sin gente) Espejismos temporales que dejan en evidencia nuestro impacto en la Tierra pero que no nos aportan la solución. Lejos de ironías sí que hemos visto cómo hemos sido y seguimos siendo capaces de afrontar esta situación excepcional …y creo, que eso en el día de la Tierra merece la pena celebrarlo. No hemos descubierto nada nuevo pero sí que hemos comprobado que tenemos capacidad para afrontar retos universales. Como si se nos hubiera estropeado algo y lejos de saber cómo arreglarlo, tenemos delante de nosotros todas las herramientas que necesitamos. Por eso, celebremos en el Día de la Tierra que:
- Somos capaces de poner el interés colectivo por encima del individual y hemos visto el impacto que eso tiene. ¡Hagámoslo! Pensamientos habituales como “¡Qué más da si yo no cojo el coche! ¡Da igual que yo compre productos de cercanía si todo el mundo compra en grandes supermercados!
- Somos capaces de confiar en las personas que más saben. En esta crisis, los científicos han tomado la palabra y hemos escuchado. Hemos asumido que la incertidumbre es parte del conocimiento y que aun así tenemos que actuar.
- Somos capaces de reconocer el esfuerzo de quienes cuidan de lo importante. Cada día a las 20:00 horas, los aplausos recuerdan que hay personas muy valiosas que cuidan de nuestra salud. Nuestra salud depende no solo de quienes están cerca de nosotros en la enfermedad, también de quienes trabajan para que tengamos una rica naturaleza, ríos limpios, aire puro…
- Somos capaces de ver en lo rural, en la agricultura y en la ganadería, elementos indispensables para nuestro bienestar. Tener alimentos saludables que ayuden a mantener nuestro patrimonio natural y nuestros pueblos es gracias a nuestros agricultores y ganaderas. La España Vaciada no es un problema de los pueblos, es un problema de todos. ¡Apostemos por modelos territoriales sostenibles!
Este Día de la Tierra nos recuerda que estamos todos conectados y que tenemos una gran oportunidad para dar un paso de lo solitario y masivo a lo individual y colectivo.
Más allá de las cifras que muestran de lo que somos capaces. En el día de la Tierra celebremos que muchos hemos tomado consciencia de ella y del lugar que ocupamos. No se trata de imaginar la Tierra como algo esotérico sino de sentir lo que somos… ¿Y qué somos? ¿consumidores de alimentos, de combustibles, de tecnología, de psicólogos, de gimnasios, de cremas, de entretenimientos, de pastillas, de destinos turísticos, de experiencias gastronómicas, de cultura…? O somos personas que viven, que se mueven, que están sanas, que disfrutan de la familia, ¿los amigos, cultura o la comida? Este Día de la Tierra nos recuerda que estamos todos conectados y que tenemos una gran oportunidad para dar un paso de lo solitario y masivo a lo individual y colectivo.
Laura García Pierna
Técnico de la Fundación Global Nature