La aguja colinegra cría en la provincia de Palencia tras 30 años
- La biodiversidad de los humedales se ve favorecida gracias a las labores de mejora de la inundación y gestión hídrica de dos humedales de Tierra de Campos, con una buena representación de especies de fauna y flora.
- La mejoras en la gestión hídrica de humedales como la laguna de Pedraza fomenta la presencia de diferentes aves como la aguja colinegra, que se reproduce en Palencia por segunda vez desde hace 30 años.
- La flora acuática también se ve favorecida, especialmente las praderas sumergidas de carófitos, unas algas verdes responsables de la oxigenación de las aguas
La inversión y mejoras de la gestión de espacios naturales ricos en biodiversidad como los humedales conllevan grandes beneficios, entre ellos, la presencia de más especies de aves reproductoras. Es lo que ocurre en las lagunas de Boada y Pedraza, en Palencia, en las que, gracias a los seguimientos que la Fundación Global Nature (FGN) realiza periódicamente junto a al Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, se ha detectado una pareja de aguja colinegra entre los meses de abril y junio. Los trabajos de restauración y gestión de estas lagunas han sido realizados por la FGN, junto a la Diputación de Palencia y, continúan en la actualidad gracias a proyectos europeos como el LIFE Paludicola que protege al carricerín cejudo y consigue ser un paraguas ambiental que beneficia a muchas otras aves.
La enorme superficie inundada y el desarrollo de la vegetación de las lagunas de esta primavera de 2020 se ha dejado notar sobre la comunidad de aves acuáticas, especialmente sobre las especies reproductoras. En total, se ha detectado la reproducción de 16 especies de aves, 14 en la laguna de Boada y 12 en la laguna de Pedraza. Algunas lo hacen de manera regular todos los años y son las que cuentan parejas más numerosas como las gaviotas reidoras, las avefrías europeas y las cigüeñuelas comunes. Pero otras lo hacen ocasionalmente, solo cuando las condiciones de encharcamiento y desarrollo de la vegetación les son muy favorables.
Este es el caso de la aguja colinegra (Limosa limosa), una especie de limícola muy habitual en los pasos migratorios y en la invernada en zonas costeras, pero con citas de reproducción muy escasas a nivel ibérico. Pero durante abril y junio de este 2020 en la laguna de Pedraza, ha permanecido una pareja con notables manifestaciones territoriales y defensa: gritos de alarma, vuelos en círculo y comportamientos de distracción, si bien no se ha podido constatar el éxito de la cría. Este registro constituye el segundo registro de reproducción de esta especie en la provincia de Palencia, después de que criara con éxito una pareja el primer año de la restauración de la laguna de La Nava en 1990, hace ya 30 años. La cría en Castilla y León es irregular en las lagunas de Villafáfila, y muy esporádica en el resto de la comunidad, donde los humedales con citas reproductoras no superan la media docena.
Entre los pequeños pájaros, los paseriformes, destaca la reproducción de la buscarla unicolor (Locustella luscinioides), con ocho machos cantores en Boada y dos en Pedraza. Es una especie también muy escasa como reproductor en Castilla y León, pero en evidente expansión en muchos humedales de este territorio. De hecho, los machos localizados en Pedraza constituyen la primera cita de reproducción en este humedal y los cinco machos cantando en Boada suponen su mayor registro.
La flora acuática también se beneficia de estas acciones y junto a las lluvias de abril ha permitido un espectacular crecimiento de la vegetación de los humedales, buen ejemplo de ello son la extensa superficie que ocupan varias especies del género Chara. Estas forman las denominadas praderas sumergidas de carófitos, que son un tipo de alga verde clave en la dinámica ecológica de los humedales ibéricos, responsables de mantener las aguas transparentes y difundir el oxígeno disuelto a las mismas
El trabajo en los humedales
Es importante resaltar que, en la provincia de Palencia y gracias al trabajo de la Fundación Global Nature, se consiguió la restauración de varios humedales esteparios en Tierra de Campos, entre los más importantes están las lagunas de Boada y de Pedraza a partir del año 1998. Durante los últimos años, la existencia de un convenio de colaboración de la Fundación Global Nature con la Diputación de Palencia ha permitido continuar con las labores de recuperación y gestión de estos dos importantes humedales y no solo continúan siendo un punto importante para la recuperación de hábitats de interés comunitario, sino que también lo son para la invernada, el paso y la reproducción de numerosas especies de aves acuáticas. A este convenio, hay que unir la inversión que realiza el proyecto LIFE Paludicola, que entre otras actuaciones ha permitido mejorar la capacidad de inundación de la laguna y mantener agua hasta el final de la reproducción, clave para el éxito de cría de muchas especies acuáticas.
Este proyecto LIFE Paludicola ha permitido la ejecución de obras de mejora de la inundación y gestión hídrica. Por un lado, se han mejorado las infraestructuras de captación y derivación de agua hacia las lagunas mediante el arreglo de tomas de agua, compuertas y azudes; principalmente del arroyo del Salón en el caso de Pedraza y canal de Castilla en el caso de Boada. Por otro lado, se ha actuado en la propia cubeta lagunar, que en el caso de la laguna de Pedraza consintió en recuperar la conectividad central del arroyo Madre a través de la eliminación puntual de las motas de tierra, favoreciendo así la laminación natural del agua. Estas obras unidas a las importantes lluvias primaverales de 2020 han permitido una inundación muy extensa de su superficie esta temporada.
El proyecto LIFE Paludicola
El proyecto LIFE Paludicola se desarrolla en tres municipios de Tierra de Campos de la provincia de Palencia y en otros nueve municipios de otras dos regiones españolas, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, todas ellas incluidas en espacios de la Red Natura 2000. Tiene como objetivo principal el estudio y la conservación del hábitat migratorio del carricerín cejudo, una de las aves más escasas y amenazadas de España y Europa. Estas acciones se llevan a cabo durante el período 2017-2020.
Este proyecto se desarrolla por la Fundación Global Nature y la Junta de Castilla y León, cuenta con el apoyo del instrumento financiero LIFE de la Unión Europea, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a través de la Fundación Biodiversidad, la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural de la Generalitat Valenciana, el Ayuntamiento de Torreblanca (Castellón) y la empresa INFERTOSA, junto con la colaboración de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.