Los huertos de biodiversidad se confirman como exitosas herramientas educativas
- El proyecto continúa en 2020 y consolida la línea de trabajo basada en la formación de los docentes gracias a los resultados de la primera experiencia en la Comunidad Valenciana
- El trabajo de estos últimos años muestra cómo se pueden trabajar conceptos como la economía circular, el reciclaje y el cuidado de la naturaleza a través de los huertos.
Valencia, 12 de febrero de 2020
Trabajar conceptos como la economía circular, el reciclaje y el cuidado de la naturaleza en centros educativos a través de “Huertos de Biodiversidad”. Ese es el objetivo del proyecto en el que trabajan Ecoembes, la organización sin ánimo de lucro encargada de la gestión de envases en España, Fundación Global Nature (FGN) y diferentes administraciones locales y regionales y que se dirige al corazón mismo de la enseñanza. Gracias al trabajo conjunto, se ha conseguido que diversos centros educativos ubicados en Castilla-La Mancha, El Hierro o la Comunidad Valenciana hayan incorporado en su plan formativo los huertos como tarea rutinaria dentro de sus actividades escolares.
Los buenos resultados obtenidos permitirán que este durante 2020 el proyecto llegue a nuevas zonas de la península y avance en una línea de trabajo basada en la formación de la comunidad docente y que permita a los centros ser cada vez más autónomos, algo que se ha puesto en práctica en la Comunidad Valenciana con resultados muy positivos. La formación ha sido principalmente práctica en los huertos, pero el camino por el que se apuesta durante es nuevo año es fomentar una formación más completa para el profesorado, tanto teórica como práctica.
De hecho, el objetivo es que el mantenimiento de los huertos sea cada vez más independiente por parte de cada centro, quedando solo una labor de asesoría por parte de FGN para avanzar en nociones de economía circular y cuidado medioambiental. Así, con las actividades realizadas durante estos años, los centros aprenden a gestionar los huertos por sí mismos, de una manera fácil y sencilla, perdiendo el miedo a tener un huerto en su centro escolar y sirviendo, a su vez, de ejemplo a otros muchos de los alrededores. Como material auxiliar y de apoyo, todos los centros tienen a su disposición distintos manuales que se han generado durante esta etapa (tanto en lengua castellana como en lengua valenciana), así como de otros documentos facilitados por Ecoembes.
En “Huertos de Biodiversidad” se ha trabajado, entre otros, en vermicompostadoras y compostadoras creadas que ya producen compost para mantener los huertos. Otra de las líneas más importantes es la reutilización y reciclado de botellas de plástico, que permite mostrar al alumnado cómo un residuo puede transformarse en diferentes recursos: huerto vertical, regadera, riego por goteo, herramientas, semilleros, etc.
Ejemplos de éxito en la Comunidad Valenciana
Como casos de éxito, está la gran participación y motivación de colegios como el CEIP Lluís de Santàngel de Valencia, que han denominado al curso escolar 2019/2020 como Any de l’hort (el año del huerto) y han enfocado todas sus actividades anuales al huerto escolar creado con este proyecto. En concreto, se han construido jardineras con contenedores de almacén de cebollas, cajas de transporte de aires acondicionados y con neumáticos de coche. Una vez en el terreno, se han decorado y preparado para poder llevar a cabo la plantación. Más de 450 estudiantes han participado en la construcción y mantenimiento de este espacio.
De hecho, el buen funcionamiento en la Comunidad Valenciana ha propiciado la creación de un documento enfocado tanto para alumnos como para profesores. Se trata de un manual de 24 páginas en lengua valenciana, con información muy útil para poder mantener un huerto de biodiversidad de manera adecuada y enfocado a la conservación de la diversidad agrícola valenciana.