Especies
En los humedales donde trabajamos se realizan censos de aves acuáticas, y palustres. Estudiamos la población de aves de los humedales, y la migración otoñal de pequeñas aves palustres en sus rutas migratorias. En algunas acciones de anillamiento científico participan voluntarios que conocen así estos trabajos de conservación. El anillamiento de aves migratorias permite obtener información como la fenología migratoria, la abundancia, la biometría, el estado físico y los lugares de origen y destino de migración de las aves. Con ello se amplía el conocimiento necesario para definir las estrategias migratorias de las aves. El carricerín cejudo (Acrocephalus paludicola) es el paseriforme más amenazado de Europa. Su anillamiento ha permitido conocer el viaje de esta especie tras recalar en sitios como: un humedal cercano al mar Báltico, al sur Lituania, y en otros de León o Burgos lo que confirman que la importancia de los humedales ibéricos de la meseta Norte.
Además de las aves otras especies son buenos indicadores de la salud de los humedales, tal es el caso de las “hadas de los charcos”, nombre que reciben unas especies de anostráceos que viven en medios acuáticos temporales («vernal pools»), tanto de agua dulce como salada, que se forman tras las lluvias y que se secan completamente durante el período de verano. En la Península Ibérica, numerosas investigaciones coinciden en la necesidad de realizar un esfuerzo para la conservación de los anostráceos como “grupo bandera” para la conservación de medios estos acuáticos temporales. Son animales crustáceos, pero que no tienen caparazón y cuyo origen se remonta al Jurásico. Con este objetivo y en colaboración con el Museo Nacional de Ciencias Naturales realizamos trabajos de investigación que permitan determinar las mejores prácticas de gestión y conservación de estos medios y de sus especies.
En ocasiones los trabajos consisten en luchar contra especies exóticas invasoras y cuenta con el apoyo de voluntarios, tal es el caso de los trabajos que desarrollamos desde el Espai Natura de Torreblanca para la conservación del galápago europeo (Emys orbicularis). Cada campaña incluye una primera fase de formación en la que se explica a los voluntarios la problemática, se les enseña a identificar especies, se construyen o reparan las trampas de cebo, se procede a su colocación en el medio natural y se organizan los grupos de trabajo para el seguimiento y control posteriores.